Las tecnologías de reciclaje químico se clasifican en tres categorías: purificación, despolimerización y conversión.
PRÁCTICAS SOSTENIBLES
Jorge Rodríguez
11 de septiembre de 2023
Desde que comenzaran a desarrollarse las tecnologías de reciclaje químico, estos procesos han venido recibiendo distintas denominaciones. Reciclaje avanzado, reciclaje molecular, etc. Un nuevo estudio publicado por Closed Loope Partners detalla las diferencias que existen entre estas tecnologías.
El reciclaje molecular puede complementar al reciclaje mecánico
El estudio, titulado ¿Qué es el reciclaje químico, por qué tiene tantos nombres diferentes y por qué es importante? es el resultado de 18 meses de investigación sobre los impactos ambientales y la viabilidad financiera de varios tipos de tecnologías de reciclaje químico, realizado con el objetivo de comprender "cómo y si estas diversas tecnologías pueden encajar en un futuro circular para los plásticos". A nivel general, el informe concluye que las tecnologías de reciclaje químico se pueden clasificar en tres categorías distintas: purificación, despolimerización y conversión.
"El reciclaje molecular es un término amplio, también conocido como reciclaje químico o reciclaje avanzado, que abarca docenas de tecnologías que utilizan solventes, calor, enzimas e incluso ondas sonoras para purificar o descomponer una amplia gama de materias primas plásticas para crear polímeros, monómeros, oligómeros o productos de hidrocarburos para que puedan volver a ingresar en las cadenas de suministro de fabricación, en lugar de ir al vertedero", señala el informe.
Las tecnologías sólo deberían considerarse circulares cuando las cadenas de suministro produzcan un producto final, lo que excluye los combustibles.
Según especifica el documento, las tecnologías sólo deberían considerarse circulares cuando las cadenas de suministro produzcan un producto final, lo que excluye los combustibles.
"El reciclaje molecular es un grupo de tecnologías que pueden complementar el reciclaje mecánico y ayudar a ampliar la cantidad de desechos plásticos que podemos reciclar. No es una solución milagrosa, pero desempeña un papel importante en la creación de una solución para los residuos plásticos. Un futuro para nuestros plásticos más difíciles de reciclar, especialmente los plásticos que no son de un solo uso ni de embalaje".
Nuestro actual sistema de reciclaje mecánico está diseñado para abordar sólo una pequeña fracción de los plásticos en el mercado, es decir, botellas de agua de plástico (PET), botellas de leche (HDPE) y, en algunos mercados, envases de yogur (polipropileno rígido). Los envases de plástico, como las películas de plástico (LDPE) y los envases transparentes en los que se venden muchas mezclas para ensaladas (PET termoendurecibles), a veces se reciclan para convertirlos en madera plástica. Los textiles y los plásticos duraderos se reciclan en menores cantidades o no se reciclan en absoluto porque hay una demanda menos constante de estos plásticos reciclados. Como consecuencia, la mayoría de los residuos plásticos acaban en los vertederos.
Las tecnologías de conversión podrían aceptar el 82% de todos los envases de plástico producidos
Las tecnologías de purificación pueden procesar residuos electrónicos y películas. Las tecnologías de despolimerización, que se centran principalmente en PET y poliésteres, son una solución de reciclaje fundamental para los textiles sintéticos, incluidas alfombras y ropa deportiva. Las tecnologías de conversión como la gasificación pueden incluso aceptar residuos mixtos, descomponiendo la materia prima en átomos básicos de carbono e hidrógeno.
Se necesitan más soluciones upstream y downstream, incluido el diseño, la reutilización y mejores políticas.
Sin embargo, según el informe, se necesitan más soluciones upstream y downstream, incluido el diseño, la reutilización y mejores políticas. Tras evaluar nueve procesos tecnológicos y su eficiencia en el tratamiento y procesado de volúmenes totales de envases aceptados en Estados Unidos y Canadá, el estudio encontró que las tecnologías de conversión podrían aceptar el 82% de todos los envases de plástico producidos, más que las tecnologías mecánicas, de purificación o despolimerización por sí solas.
"Este tipo de tecnologías también pueden procesar desechos plásticos mixtos, mientras que la purificación y despolimerización requiere una materia prima clasificada y de una sola resina. Debido a que la materia prima se puede mezclar, a las empresas de tecnología de conversión a menudo se les paga para que acepten la materia prima en lugar de pagar por la materia prima". Sin embargo, los investigadores autores del estudio observaron que al analizar la cantidad de PCR que puede producir cada categoría, las tecnologías de conversión "tienen un camino más largo para volver a convertirse en plástico".
El informe estima que si se utilizaran 1.000 Kgs. de materia prima plástica en cada una de las tres tecnologías, la purificación produciría el mayor volumen de PCR, mostrando una eficiencia de procesamiento de material del 88%. Las tecnologías de conversión arrojaron la cantidad más baja, mostrando una eficiencia de procesamiento del 42%. "La capacidad de alejarse de los plásticos vírgenes requiere que el sector del reciclaje sea lo más eficiente posible", recuerda el informe.
Las tecnologías de purificación y despolimerización tuvieron en promedio menores huellas ambientales.
Desde una perspectiva ambiental, las tecnologías de purificación y despolimerización tuvieron en promedio menores huellas ambientales, teniendo en cuenta el uso de energía, las emisiones de gases de efecto invernadero y los impactos en el agua.
Al analizar la viabilidad económica de las tecnologías, en función del coste y la accesibilidad de las materias primas y la demanda del mercado de los productos, el estudio encontró que, de nueve empresas de tecnología, siete tuvieron una tasa interna de retorno positiva, tomando como año base 2021. El estudio concluyó que el sector del reciclaje químico es "increíblemente matizado y diverso" y por ello debe analizarse cuidadosamente cada uno de los factores antes de invertir. "La oportunidad para las marcas de consumo, los responsables políticos y los inversores es colaborar para desarrollar una visión de éxito para este sector", concluye el estudio.