Lunes, 1 de mayo de 2023 | La industria europea del reciclaje, representada por EuRIC, ha acogido “con satisfacción” la propuesta de la Comisión Europea para el nuevo
Reglamento sobre Envases y Residuos de Envases. La organización reconoce el compromiso de Bruselas de establecer medidas ambiciosas para impulsar la circularidad de los envases y ha publicado un documento en el que fija su posición sobre las medidas que persiguen reducir la acumulación de los residuos de envases. EuRIC cree que
la reciclabilidad es la clave.
“No es lo mismo un envase diseñado para ser reciclado que un envase reciclable”, afirma EuRIC en su
documento de posición. En este sentido, desde la entidad apoyan el establecimiento de una definición clara de lo que se considera “envase reciclable” pues consideran que los criterios que establece el actual Reglamento “parecen insuficientes para garantizar que todos los envases sean efectivamente reciclables”. “Con la propuesta de la Comisión”, advierte EuRIC, “
los recicladores de envases tendrán que hacer frente a flujos de entrada no aptos hasta 2035. Para 2030, podría haber envases que sean reciclables en teoría, pero no en la práctica. En 2035, el 25% de la población de la UE podría seguir utilizando envases que en realidad no podrán ser reciclados”.
Además, “es evidente que, si no hay entrada de material reciclable, no puede haber una salida de materiales reciclados de alta calidad. Para conseguir este reciclaje de alta calidad, todos los envases no reciclables tienen que ser eliminados tan pronto como sea posible”. EuRIC insta a Bruselas a adelantar las fechas de cumplimiento de los objetivos sobre reciclabilidad de los envases. “El Diseño para el Reciclaje (DfR) debe implementarse antes de 2030, y los requisitos para garantizar que los envases se reciclen a escala deben aplicarse en 2030”.
Respecto a la obligación de incorporar contenido reciclado en los envases de plástico, EuRIC apoya firmemente los objetivos propuestos “en diferentes niveles dependiendo de la sensibilidad de contacto de las diferentes aplicaciones de envases”. La institución argumenta que, fijándose en el éxito que ha tenido el establecimiento de estos objetivos sobre contenido reciclado en las botellas de PET, la medida “ha demostrado ser la única manera de desligar los precios del PET reciclado de los precios del PET virgen y, por lo tanto, impulsar las inversiones en desarrollo de capacidades a lo largo de la cadena de valor del reciclaje”. Para EuRIC, “los objetivos de contenido reciclado son la herramienta más eficiente para obtener recompensas y beneficios ambientales del reciclaje, impulsar la demanda de materiales reciclados para nuevos productos y nivelar el campo de juego con las materias primas fósiles”.
Los envases compostables no aportan “valor añadido en lo que se refiere a la consecución de los objetivos de la economía circular” para EuRIC. “La mayoría de los plásticos biodegradables no están debidamente desechados al final de su vida útil y son mezclados con plásticos reciclables tradicionales. Esto crea un impacto negativo en la eficiencia de los sistemas convencionales de clasificación y reciclaje de plásticos en toda la UE y pone en peligro la calidad del material reciclado porque los plásticos biodegradables, a diferencia de los plásticos de base biológica, actúan como contaminantes, disminuyendo la calidad de los materiales reciclados”.
EuRIC propone una lista cerrada de formatos de envases fabricados con plásticos biodegradables que puedan desecharse como biorresiduos en los esquemas de recolección, siempre y cuando el material sea compostable a nivel doméstico o cuyo proceso de compostaje en una planta industrial no supere las 3 semanas. “No se debe permitir el plástico compostable para todos los envases domésticos que sean para reciclar, ya que conduce a un mensaje de clasificación poco claro a los consumidores e interrumpe el proceso de clasificación y reciclaje de plástico”.
La organización muestra “preocupaciones sobre la coherencia de los objetivos de reutilización”. “El reciclaje y la reutilización son complementarios”, dice EuRIC, “y deben priorizarse sobre la base de su impacto ambiental. Los envases con un alto rendimiento en circularidad deben estar exentos de los objetivos sobre reducción y reutilización”. Además, el documento argumenta que los objetivos de reutilización pueden tener un impacto negativo en el acceso a los mercados de algunos materiales que no se ajusten bien a los requisitos sobre reutilización, pero que sean en cambio muy aptos para el reciclaje. “Podría ser perjudicial para el uso de materiales reciclados. Los objetivos establecidos en la propuesta legislativa de la CE deben centrarse en los mercados donde es necesario mejorar el rendimiento de la circularidad”.
EuRIC hace también una llamada para implementar medidas que aumenten las tasas de recolección, fundamentales para lograr los objetivos de contenido reciclado. “Las botellas y latas de plástico de un solo uso no deberían ser el único objetivo de las inversiones en recolección de envases”, señalan. “Igualmente, los Sistemas de Devolución de Depósitos no deben ser considerados como la bala de plata para incrementar tasas de recolección”.
EuRIC apoya el cambio de formato legal de Directiva a Reglamento para garantizar una aplicación y un cumplimiento armonizados de las nuevas normas, “esenciales para preservar un buen funcionamiento del mercado interior, así como un alto nivel de circularidad de los envases comercializados en toda la UE”.