La IA mejorará la sostenibilidad y la eficiencia operativa de la industria del envasado, cambiando la comunicación entre las marcas y sus clientes.
ENVASES Y EMBALAJES
Jorge Rodríguez
16 de septiembre de 2024
La inteligencia artificial (IA) transformará la relación de las empresas con los consumidores y el packaging es una de las formas con las que las firmas interactúan con los destinatarios de sus productos. La IA va a mejorar la personalización, la sostenibilidad y la eficiencia operativa de la industria del envasado, marcando un cambio significativo en la comunicación entre las marcas y sus clientes.
La IA optimizará el diseño de los envases plásticos, minimizando el uso de materiales y reduciendo el desperdicio
Los avances en IA permiten a las marcas diseñar y personalizar los envases plásticos de una manera más eficiente, asegurando que no sólo sean estéticamente atractivos, sino también funcionales y alineados con las expectativas del consumidor. A través de algoritmos que analizan grandes volúmenes de datos, la IA es capaz de identificar patrones y preferencias de los usuarios. Esto permite que las empresas adapten sus envases de manera más precisa, logrando una mejor experiencia de usuario.
Identificar estos patrones de consumo requería antes grandes inversiones de tiempo y recursos. Ahora, se obtendrán resultados más rápidamente, de forma más precisa y a un coste mucho menor. Los envases plásticos personalizados no sólo cumplen con las expectativas del cliente, sino que también se alinean con las necesidades prácticas, como la información nutricional o las pautas de uso en productos alimenticios y farmacéuticos.
Podrá controlarse la temperatura, la humedad y la presión a las que los alimentos están expuestos, incorporando sensores en el envase que monitorean el estado del producto.
Además, la IA se puede integrar con tecnologías de envases inteligentes, como los códigos QR y las etiquetas NFC. Estos elementos interactivos permiten a los consumidores escanear los envases plásticos con sus teléfonos móviles para acceder a contenido adicional, como promociones, recomendaciones, detalles del producto e información sobre los materiales que componen el envase y la forma correcta de desecharlos. Este tipo de interacción aumentará la transparencia y generará una mayor confianza en la marca.
Los envases y embalajes inteligentes pueden incorporar tecnologías como sensores, etiquetas RFID (identificación por radiofrecuencia) y NFC (comunicación de campo cercano), que mejoran tanto la experiencia del cliente como la eficiencia operativa de las empresas.
Podrá rastrearse la ubicación y el estado de los productos a lo largo de toda la cadena de suministro
La incorporación de sensores que monitorean el estado del producto permite detectar la temperatura, la humedad y la presión a las que los productos están expuestos. Esto es especialmente importante para los productos perecederos, como alimentos y productos farmacéuticos. Los envases plásticos con sensores pueden alertar a los minoristas y consumidores si un producto ha estado en condiciones inadecuadas que puedan comprometer su calidad o seguridad.
Los consumidores pueden escanear ciertos elementos de los envases para acceder a promociones, recomendaciones, detalles del producto e información sobre los materiales que componen el packaging y la forma correcta de desecharlos.
Las etiquetas RFID y NFC son tecnologías que permiten el seguimiento en tiempo real y la autenticación de productos. Son particularmente útiles en los envases plásticos utilizados en la industria alimentaria o farmacéutica, donde la trazabilidad y la autenticidad son cruciales. Las etiquetas RFID permiten a las empresas gestionar el inventario de manera más eficaz, reduciendo las pérdidas por robo o deterioro. Por otro lado, las etiquetas NFC brindan a los consumidores acceso a información instantánea simplemente escaneando el envase con un smartphone, lo que genera una interacción más profunda con el producto y la marca.
Otro avance en los envases plásticos inteligentes es el desarrollo de los llamados "envases activos". Estos envases están diseñados para interactuar con el contenido del packaging, extendiendo su vida útil y preservando su calidad. Los envases plásticos activos pueden incluir elementos como captadores de oxígeno, que reducen la oxidación, o agentes antimicrobianos, que inhiben el crecimiento de bacterias en los alimentos. Estos avances son fundamentales en la industria alimentaria para garantizar que los productos se mantengan frescos y seguros durante su distribución y consumo.
Se identificarán patrones y preferencias de los usuarios de forma más precisa y eficiente, sin grandes inversiones en tiempo y recursos
Uno de los desafíos más apremiantes en la industria del envasado es la sostenibilidad, especialmente en lo que respecta a los envases plásticos. La integración de la IA con los procesos de diseño y producción de envases plásticos ha abierto nuevas oportunidades para mejorar su sostenibilidad. La IA permite optimizar el diseño de los envases plásticos para minimizar el uso de materiales y reducir el desperdicio. Del mismo modo, la IA se puede utilizar para diseñar envases plásticos más eficientes, que requieren menos material sin comprometer la integridad o funcionalidad del envase. Esto no sólo reduce los costes de producción, sino que también disminuye la cantidad de residuos plásticos generados.
Las etiquetas RFID y NFC son tecnologías que permiten el seguimiento en tiempo real y la autenticación de productos; particularmente útiles en los envases plásticos utilizados en la industria alimentaria o farmacéutica, donde la trazabilidad es crucial.
Además de reducir la cantidad de plástico utilizado, las empresas están explorando nuevas formulaciones para hacer que los envases plásticos sean más reciclables o biodegradables. La IA desempeña un papel fundamental al identificar y recomendar materiales que sean más sostenibles y que puedan cumplir con los requisitos funcionales del envase. Por ejemplo, los plásticos compostables o los bioplásticos están ganando terreno en la industria del embalaje, y la IA ayuda a optimizar su uso y producción para garantizar que sean viables a gran escala.
Los envases plásticos inteligentes, habilitados por la IA, también mejorarán la eficiencia de la cadena de suministro. Los datos en tiempo real proporcionados por los sensores y etiquetas permiten a las empresas rastrear la ubicación y el estado de los productos a lo largo de toda la cadena de suministro. Esto no sólo mejora la gestión logística y reduce el desperdicio, sino que también permite a las empresas planificar mejor sus operaciones y responder rápidamente a cualquier incidente que pueda comprometer la calidad del producto.
Los "envases activos" interactuarán con el producto, reduciendo la oxidación, evitando agentes microbianos y preservando su calidad
Sin embargo, también existen algunas cuestiones que los envases inteligentes pondrán sobre la mesa, y será necesario abordar. La cantidad de datos que se recopila a través de los sensores, etiquetas inteligentes y otros dispositivos integrados en los envases inteligentes obligará a establecer mecanismos para garantizar la seguridad y privacidad, protegiendo la información personal del consumidor y evitando su uso indebido. Los datos que se recopilen a través de estos envases revelarán nuestros hábitos, localización, etc.; pudiendo utilizarse para estrategias de publicidad personalizada y marketing.
Por otro lado, algunas voces del mercado han avanzado que los envases inteligentes podrían influir negativamente en el comportamiento de los consumidores, haciendo que estos decidan sólo comprar productos con unos niveles de frescura extremos, dejando de lado otros que estén en condiciones óptimas, sólo por tener un nivel de frescura menor.
Aunque será necesario superar los desafíos que plantea el futuro del packaging inteligente, las empresas que adopten estas tecnologías no sólo podrán ofrecer una experiencia superior al cliente, sino que también estarán mejor posicionadas para cumplir con las crecientes demandas de sostenibilidad.